Falso amigo n.º 78: fabric (inglés) ≠ fábrica (español)
La palabra fábrica designa en castellano a un edificio dedicado a producir industrialmente determinados artículos destinados a su comercialización. Aunque las fábricas, tal y como las entendemos hoy en día, no existían antes del siglo XVIII, su nombre tiene antiguas raíces. Viene del latín faber, que significa el artesano, el que fabrica. En la época preindustrial la palabra fábrica se utilizaba como sinónimo de fabricación y también servía para designar a edificios con cierto empaque. Cuando llegó la revolución industrial, el término acabó refiriéndose a los edificios donde se fabricaban objetos. La lógica es total. Lo que en castellano se llama fábrica, en italiano es fabbrica, en alemán Fabrik, fabriek en holandés… y factory en inglés.
Y es que los ingleses, que también tenían la voz fabric (prestada del francés fabrique), y que hasta finales del XVIII su campo semántico era similar al de las voces hermanas de otros idiomas, decidieron cambiarle el significado. Fabric en inglés significa tela, tejido. Uno de los ámbitos donde antes se presintió el tremendo potencial de la Revolución Industrial fue el textil y para mí que eso tuvo algo que ver en todo ello. En el siglo XVIII surgió la lanzadera volante, que se convirtió en uno de los primeros artilugios que vino a revolucionar la manufactura de telas. Con este cachivache, cada artesano dedicado a tejer duplicaba su potencial, por lo que aumentó la demanda de hilos de manera espectacular, mientras bajaba la necesidad de artesanos tejedores. Los hilanderos se pusieron muy contentos hasta que otro inventó una máquina hiladora. Tras unos cuantos inventos de estos y los primeros artesanos «reconvertidos» en peones de fábrica la industria textil moderna ya estaba en marcha en el Reino Unido. Entonces, la palabra fabric pasó rápidamente de designar al edificio a designar el objeto manufacturado. Y ya que de las primeras fábricas brotaron sobre todo tejidos, al material textil se le llamó en inglés fabric, reservándose el término factory para el edificio.
En la imagen ilustrativa he mezclado ambos conceptos utilizando fabric, trozos de tela (fabricados en serie), para crear la imagen de una simpática fábrica. Por supuesto, para mantener el punto de vista contradictorio que no debe faltar en ningún falso amigo, lo he hecho de un modo artesanal.