Falso amigo n.º 84: escova (portugués) ≠ escoba (español)
Una escoba es un utensilio que sirve para barrer la casa. Ahora se confecciona con productos sintéticos, pero en un principio era un manojo de ramillas flexibles.
Con una herramienta de estas características se pueden realizar numerosas actividades. Cepillarse el pelo, los dientes, limpiar objetos angulosos, rascarnos la espalda… Pero lo que define a una escoba es su función primordial, que es quitar el polvo del suelo. Es lo que distingue a una escoba del resto de cepillos, de los que la RAE solo dice que tienen «distintos usos de limpieza». Bueno, sí, siempre habrá personajes desconcertantes, como brujas u organizadores de carreras ciclistas, que le otorgarán a la escoba las más variopintas funciones, pero digamos que son excepciones.
Algo vimos del origen de esta palabra en el falso amigo nº 70, hablando de las escopette (=escobillas) italianas. En latín escoba se decía scopa, nombre que también hacía alusión a la planta con que se confeccionaba la escoba, igual que hoy a la retama o hiniesta se le puede llamar también escobera. De esta scopa latina vienen la escoba castellana y la escova portuguesa.
Constatamos que los falsos amigos de esta entrada son sutiles. En portugués se llama escova a lo que en español se llama cepillo. La diferencia no es grande, pero cuando un hispanohablante escucha la expresión escova de dentes por un momento tiende a recrear una imagen ciertamente inquietante en su cerebro. La pregunta es: ¿se hace en portugués la misma distinción entre la escoba de barrer y el resto de cepillos? La respuesta es afirmativa. Y a veces parece que el mundo de los falsos amigos está hecho adrede. En portugués a la escoba se le llama vassoura. Sí, en los cuentos portugueses as bruxas voavam en vassouras. Una bruja portuguesa con una escova es algo tan ridículo, y con una movilidad tan limitada, como la imagen que presento para ilustrar esta pareja de falsos amigos.